Una afectación relacionada con una úlcera puso fin a los días de Omar Gamboa, de 44 años de edad, sin embargo, allegados y familiares de este hombre advirtieron que ‘su día’ no tenía por qué haber llegado esta semana, sino que se adelantó por la falta de una ambulancia en el corregimiento Yarima, de San Vicente de Chucurí.

La víctima de este caso era una persona dedicada a su familia y al trabajo. Se le medía a lo que saliera, y eso incluía labores en una mina de piedra y extractoras de palma. No obstante, su vigorosidad se vino abajo el pasado viernes, cuando un vómito incontrolable lo obligó a trasladarse al puesto de salud de Yarima.

“Allá lo atendieron y le brindaron atención médica, pero siguió mal y dijeron que había que trasladarlo y fue cuando llegaron los, problemas, porque no había una ambulancia. Omar tuvo que esperar casi una hora y al fin tocó traerlo a Barrancabermeja en un carro particular”, señaló una persona cercana a la familia del fallecido.

Pese a que personal médico acompañó a Omar en su improvisado traslado al Puerto Petrolero, casi media hora después de haber salido de Yarima, cuando estaba a medio camino murió. Un paro cardiorespiratorio puso fin a su vida.

“Él llegó sin siginos vitales a la clínica. Ya cuando llegamos era casi mediodía, porque la demora para traerlo fue mucha. Imagínese, al puesto de salud llegó en la mañanita. Una ambulancia pudo salvar la vida de Omar”, declararon allegados al fallecido.

Omar Gamboa era el padre de tres pequeños y tenía su lugar de residencia en el barrio Cruz de Leones.

Hoy sus familiares le darán el último adiós al padre de familia en el corregimiento Yarima.

 

Redacción:  ALEXANDER BECERRA O