Productores de cacao, aguacate y cítricos del municipio de San Vicente de Chucurí, en Santander, empezaron a registrar pérdidas económicas por cuenta de un derrumbe de 500 metros que desde hace 15 días mantiene bloqueado el paso en el sector Peña de Oro, sobre la vía principal que conecta a esa localidad con la capital del departamento, en la que semanalmente se movilizaban más de 80 toneladas de alimentos.

En medio de la situación, los transportadores han tenido que optar por otras rutas que se encuentran en mal estado para llevar los productos hacia los diferentes mercados fuera del municipio, hecho que se suma a la crisis que venían sufriendo los precios de las cosechas, los cuales han venido decayendo.

La movilización para llegar a Centro Abastos, en Bucaramanga, se dificulta, aumentando los fletes aproximadamente en un ciento por ciento

“La situación económica empezó desde hace varios meses, desde la caída de los precios del cacao, los cítricos también están pasando por momentos muy difíciles (…) Además de que están baratos los productos, la movilización para llegar a Centro Abastos, en Bucaramanga, se dificulta, aumentando los fletes aproximadamente en un ciento por ciento”, afirmó Jefferson Velásquez Navarro, concejal de San Vicente de Chucurí.

El funcionario también declaró que hasta el momento no ha habido ninguna intervención por parte del Gobierno departamental sobre el sector donde se presentó el deslizamiento, el cual fue ocasionado por las constantes lluvias, afectando cerca de 200 hectáreas en las que había cultivos, situación que corroboran algunos habitantes de la zona.

“Aquí no hay maquinaria, quedaron de mandar una retro, pero no hay nada, nos toca a pico y pala. Los campesinos y los afectados arreglaron por encima de la vía para que pasen las motos tiradas por lazos y poleas”, declaró Ovidio Gómez Suárez, campesino que tiene una finca cercana al lugar del derrumbe.

Sin embargo, la Secretaría de Infraestructura advierte que ya se están realizando trabajos en una de las vías alternas que conecta a San Vicente de Chucurí con el municipio de Albania, para habilitar el tránsito seguro mientras se soluciona la situación en el área del deslizamiento.

“Estamos disponiendo el desplazamiento de una retroexcavadora de oruga para poder empezar a revisar el sector de Peña de Oro y si lo podemos intervenir. Por ahora le vamos a hacer unas intervenciones a unas aguas que le están llegando para evitar que se siga deslizando y con eso lograremos que la desestabilización pare para hacer las obras que se requieren”, señaló Mauricio Mejía, secretario de infraestructura de Santander.

«Nos toca abrir un paso sobre el mismo sector por donde siempre se ha transitado, porque plantear una variante significa una gran cantidad de pasos que finalmente la falla los va a atravesar. Si no quisiéramos atravesar la falla alargaríamos el recorrido y la cantidad de kilómetros a pavimentar», precisó el secretario.

Artículo tomado del periódico «El Tiempo»